LOS DIOSES GRIEGOS ESTÁN LOCOS

En este Locoloquio, Artemisa (A) y Dionisio (D) se encuentran casualmente en el parque e invocan a sus amigos, los otros dioses griegos (en el texto, con mayúscula). 

A.- Hola DIONISIO, ¿Has visto a HELENA, últimamente?

D.- Hola ARTEMISA, pues… creo que esta con HERMES.

A.- ¿Timegistro?.

D.- No, deja. Ya me gistro yo solito.

A.- Pero… ¿Qué pasa? ¿Que la dejó DEMETER?.

D.- No. Aún la sigue demetiendo, pero ahora con HERMES.

A.- Para gustos, los colores.

D.- Y para los jardines, flores.

A.- En HEFESTO.

D.- ¡Me cagüen ZEUS! ¿Qué haces, ARTEMISA?.

A.- OLIMPIAndole el culo a mi hija REA ¡que me está dando un día…!

      Desde que juega con el hijo de HERCULES, no gano para pañales y polvos talco.

D.- Pues… talco moestán las cosas, yo se lo prohibiría.

A.- ¿Por qué dices eso?

D.- Sabes que no me gusta chismorrear, pero he oído que la esposa de HERCULES está

      ILIADA con HOMERO.

A.- ¿HOMERO de Torres? ¿El que pintó la mujer morena?.

D.- El mismo que embiste y calza.

A.- Yo ya había oído que HOMERO era un poco _ÍCARO, pero tanto...

D.- Es que AFRODITA es mucha AFRODITA y siempre prefirió a otros, antes que

      ALFEO de su marido.

A.- ¿Y HÉRCULES, cómo reaccionó?

D.- Cuando los descubrió estaba como POSEIDON y encima BASILEO no paraba de

      basilarle. Pero, a pesar de lo _HESTIA que es, esta vez se contuvo y sólo les amenazó:

      “¡ATENEAS a las consecuencias!”, les dijo. A saber lo que tramará ahora.

A.- ODISEA que… ¿Por eso no te parece bien que nuestros hijos jueguen juntos?

D.- No es sólo por eso. Es que toda la familia está muy alterada. HERCULITO se

      empeñó la otra tarde en que quería un APOLO de fresa. El sirviente le dijo que sólo 

      tenían APOLODOROS. Y el niño: “Pues, ponme un zumo de _HERA”, sabiendo 

      que sólo había de _anzana. Menos mal que volvió la madre y cortó por lo sano: 

      “Hasta que no te acabes el PAN, no tendrás nada de _HEBÉ”. Pero, al final, el

      chiquillo se salió con la suya y con tanta mezcla, se pasó dos HERAS de reloj

      sentado en el HERODORO.

A.- ¿Dos HERAS enteras?. 

D.- Como lo oyes; que hasta le tuvieron que dar unos PÍNDAROS para cortarle la

      diaRREA. Por cierto… ¿Qué HERA tienes?

A.- Por mi CRONOS son las 12.

D.- Bueno. Pues, AQUILES dejo, que aún tengo mucho que hacer.

A.- ¡Que las HADES te sean propicias! y ¡Pásate algún día por el Olimpo!

       Pero no te olvides de llamar antes por el PERSÉFONE.

D.- No sé... Yo soy más de vagar por la Polis. De momento, me voy de pinchos con mi primo 

      BACOpor los _ARES de la parte vieja . Luego ya _eremos.